La energía solar es una fuente de energía RENOVABLE e INFINITA proveniente del sol que todos los días irradia cada rincón de nuestro planeta, convirtiéndose así en una fuente inagotable de energía.
El efecto fotovoltaico, descubierto por Edmond Becquerel en 1839, establece que, a través de celdas fotoeléctricas compuestas por silicio, la irradiación que emite el sol mediante fotones se convierte en electrones (corriente eléctrica) que están en capacidad de suministrar energía eléctrica.
La agrupación de varias de estas celdas fotoeléctricas en una sola pieza conforma un módulo fotovoltaico, lo que generalmente conocemos como panel solar.
La modularidad de las celdas fotovoltaicas es una de las grandes ventajas de la energía solar ya que su adaptabilidad permite que se utilicen en aplicaciones muy pequeñas como cargadores de celular, pasando por sistemas solares fotovoltaicos para hogares, empresas e industrias, llegando incluso a cubrir granjas solares de cientos de hectáreas de extensión.
Dato: ¿Sabías que la energía proveniente del Sol que llega a la superficie de la Tierra en una sola hora es igual a toda la energía que consume el planeta durante un año?
El proceso para generar tu propia energía con un Sistema Solar Fotovoltaico empieza con los paneles solares que captan los rayos del sol y los convierten en corriente eléctrica continua. A través de un inversor fotovoltaico, esta corriente continua proveniente de los paneles es posteriormente convertida en corriente alterna ya que este es el tipo de energía eléctrica con la que funcionan la mayoría de nuestros hogares, empresas o industrias.
La energía proveniente del inversor es entonces posteriormente dirigida directamente a algún tablero de distribución de donde se repartirá automáticamente para alimentar las cargas que tengas (iluminación, enchufes, aparatos, electrodomésticos, etc… ) según la aplicación que necesites y necesidades que tengas.
Según la necesidad, requerimientos y restricciones, existen tres tipos principales de aplicación para los sistemas solares fotovoltaicos: Sistema Solar Interconectado a Red, Sistema Solar Aislado, o Sistema Solar Hibrido.
Independiente del tipo de aplicación, un sistema solar bien diseñado e implementado es una inversión rentable y segura a largo plazo ya que tiene una vida esperada de más de 25 años.
Si bien la tecnología solar fotovoltaica existe desde la década de los años 50, debido al costo, su uso se limitaba principalmente al desarrollo e investigación de la exploración espacial de la NASA.
Dato: ¿Sabías que el Vanguard 1, en 1958, fue el primer vehículo espacial en usar paneles solares?
Sin embargo, el constante desarrollo y adopción de la tecnología fue poco a poco generando economías de escala que desde hace dos décadas han permitido un crecimiento exponencial, en particular en Estados Unidos, Europa y China. Este boom ha hecho que el costo de los sistemas solares fotovoltaicos se haya reducido en más de un 85% en la última década, permitiendo así que hoy en día los hogares, empresas e industrias puedan implementar sistemas solares que no solo brindan beneficios ambientales sino que representan una inversión segura y de bajo riesgo.
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